Hace unos años, un estudio realizado por la gran empresa de estudio de mercados Nielsen demostró que la publicidad con música era más efectiva. La música y la publicidad van de la mano desde el inicio de las emisiones radiofónicas en los años 20 del siglo pasado, cuando determinadas empresas se dieron cuenta del gran poder que la radio poseía, al llegar cada vez a más y más personas, no dudaron en invertir dinero, creatividad y esfuerzo para que sus productos se anunciaran y llegaran a través de los receptores de radio a muchas personas.
Una genial forma de meterte en la casa del potencial cliente y presentarle productos.
Así comenzaron a sonar los primeros anuncios en radio. En un primer momento se trataba de locuciones simples, que con el paso del tiempo llegaron a ser verdaderas obras de arte, incluyendo música, actores profesionales, efectos de sonido y un sinfín de elementos que hacían de la cuña radiofónica el modo de marketing directo más importante de la época.
La música y la publicidad auditiva son dos elementos que pueden complementarse de manera efectiva para crear una experiencia única para el consumidor. La música puede tener un impacto emocional significativo en el público y puede ser utilizada para mejorar la percepción de una marca o producto. En este artículo, exploraremos las ventajas de combinar música y publicidad auditiva y cómo pueden trabajar juntas para mejorar la experiencia del consumidor.
En primer lugar, la música ayuda a establecer una conexión emocional con el público objetivo. Las personas se sienten atraídas por la música y pueden conectarse con ella a nivel emocional. Cuando se utiliza la música en la publicidad, se puede aprovechar esta conexión emocional para mejorar la percepción de una marca o producto. La música puede ayudar a evocar emociones positivas como felicidad, alegría, emoción, etc., lo que puede influir en la decisión de compra del consumidor.
Además, la música ayuda a mejorar el reconocimiento de marca. Si se utiliza una canción o melodía en particular en la publicidad de una marca, los consumidores pueden asociar automáticamente esa canción con la marca. Esto ayuda a crear una imagen más sólida y coherente en la mente de los consumidores.
Otra ventaja de la combinación de música y publicidad auditiva es que mejora la retención de la información que se transmite. Cuando se combina la música con un mensaje publicitario, la información puede ser retenida más fácilmente por el consumidor, lo cual se debe a que la música actúa como un «gancho» que atrae la atención del consumidor y ayuda a mantener su atención durante un período más largo de tiempo. Por lo tanto, la información que se presenta junto con la música puede ser retenida más fácilmente y recordada en el futuro.
Finalmente, la música aumenta la persuasión en la publicidad. La música puede ser utilizada para crear una atmósfera o ambiente particular que puede influir en la percepción del consumidor sobre un producto o servicio. Por ejemplo, si se utiliza música suave y relajante en una publicidad de spa, puede ayudar a persuadir al consumidor de que ese spa es un lugar tranquilo y relajante para visitar.
En Motiva conocemos la importancia de la música como elemento transformador, que es capaz de activar en nuestro cerebro esa chispa especial. Tanto para ambientar negocios, como para utilizarla convenientemente en una campaña de publicidad. Y no solo hablamos de los elementos positivos que aporta la música integrada en la publicidad sino también el hecho de alternar música con anuncios siempre y cuando se haga de forma inteligente y con la frecuencia adecuada.
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