Danza: expresión musical - Grupo Motiva - Hilo Musical para negocios y empresas

La relación entre las formas de expresión artística música y danza es intrínseca y profundamente interconectada. Estas se complementan y se influencian mutuamente y en positivo de varias maneras. Y es que, autores de reconocido prestigio en la pedagogía musical como Dalcroze y Orff, no conciben la enseñanza musical si esta no va acompañada de movimiento.

De hecho, la principal característica que explica la relación entre música y danza es que la primera tiene como finalidad realzar el movimiento en la segunda, ya que motiva al bailarín hacia la ejecución de los diferentes pasos y estimula al espectador hacia el disfrute de lo que está percibiendo.

A continuación, te detallamos sus características:

Ritmo y Movimiento: La música proporciona un ritmo que inspira el movimiento y para los/as bailarines el ritmo es una constante que proporciona la principal fuerza de movimiento. Los ritmos, patrones y tempos en la música sirven como guía para los bailarines, dictando el tiempo, la velocidad y la intensidad de sus movimientos. Y los pasos de danza tienen un ritmo interno propio que debe interactuar con el ritmo de la música para poder coordinarse y conseguir una base firme en el movimiento.
Compás, tempo y matices: En danza, gran parte de la música que se utiliza para bailar es contada y el compás musical nos indica cómo se debe contar la pieza que se está coreografiando o interpretando. Por otro lado, en danza los movimientos tienen también su propio tempo, ya que estos podemos sentirlos a través de la velocidad de su realización, su duración, el intervalo entre dos acontecimientos, las pulsaciones, acentuaciones, silencios o la intensidad de su ejecución. Así, existen movimientos grandes y ligados que tienen un tempo lento o largo, y otros movimientos que son más precisos y rápidos que se realizan tipo allegro. Finalmente, los matices hacen referencia a lo que afecta al grado de rapidez o lentitud con el que se ejecuta determinado fragmento de una coreografía, y a lo que afecta al grado de intensidad con que se ejecutaría determinado fragmento (o también llamado dinámica) y cuyos matices serían la fuerza, suavidad, gravedad o ligereza de los sonidos. Por ejemplo, los grandes saltos se asociarían con una dinámica fuerte.
Expresión Emocional: Tanto la música como la danza son formas de expresar emociones y sentimientos. La música puede evocar emociones que luego se traducen en movimientos y gestos corporales en la danza. Del mismo modo, la danza puede intensificar la experiencia emocional de la música al visualizar las emociones de la melodía.
Interpretación: Los bailarines a menudo interpretan la música a través de sus movimientos, capturando el estado de ánimo, el tono y la estructura de la pieza musical. La coreografía, que es la secuencia de movimientos diseñados para una pieza específica, se crea a menudo en armonía con la música subyacente.
Narrativa y Temática: La música puede contar una historia o transmitir un tema específico, y la danza puede complementar y amplificar esa narrativa. Los bailarines pueden representar personajes, situaciones o conceptos abstractos a través de sus movimientos, enriqueciendo así la experiencia auditiva con una dimensión visual.
Colaboración Artística: La música y la danza a menudo se unen en colaboraciones artísticas. Los coreógrafos pueden trabajar en estrecha colaboración con compositores para crear obras que integren música y movimiento de manera armoniosa y significativa.
Estructura y Forma: La música y la danza comparten principios de estructura y forma. Ambas pueden seguir patrones repetitivos, variaciones temáticas y progresiones dinámicas que brindan cohesión y coherencia a la obra en su conjunto.

En resumen, la música y la danza se nutren mutuamente, creando una experiencia artística más rica y completa cuando se combinan en una actuación o producción, ya que la música proporciona al bailarín o bailarina los elementos que necesita para apoyarse, expresar y comunicar sentimientos. Y la interacción entre estas dos formas de arte es esencial para la expresión humana y la creatividad.