La relación entre el ejercicio físico y la música está muy clara. Hay temas que nos dan un subidón de energía y otros que nos ayudan a relajarnos.
Diversos estudios han demostrado los efectos fisiológicos de la música: puede disminuir la ansiedad y el estrés, aumentar la concentración, la coordinación, etc.
Prácticamente todos seleccionamos música para hacer deporte, bien sea en solitario o en grupo. Subimos el volumen para aislarnos y sentir más intensamente el ritmo. Hay mucha gente que afirma alcanzar un mayor rendimiento si escucha música que le motive.
En deportes de grupo, como aerobic, steps, spinning, zumba, … la música también nos sirve de guía para coordinar los movimientos. El ritmo irá en aumento o disminución varias veces a lo largo de la sesión para una correcta actividad cardiovascular.
Cuando de relajarnos se trata, en yoga, sauna o en una camilla para un tratamiento estético o un masaje, también escuchamos música tranquila que nos facilita el relax y la concentración.
Adecuamos los canales al tipo de actividad que se desarrolle en tus instalaciones para aumentar el ritmo de ejercicios o facilitar el relax. Introduce cuñas para anunciar las horas de cierre u ofertas para socios.
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