La banda sonora de una película es la ambientación musical de una historia, de unos espacios y decorados, de unos personajes, etc. En algunos casos esta puede resultar irrelevante pero en la mayoría, esta se convierte un personaje más de la película dado su poder de modificar las emociones de los espectadores y llevarlas en la dirección que considere el relato.
En el caso de Star Wars, John Williams aplicó el concepto de «leitmotiv», una figura musical que consiste en la creación de una serie de «frases musicales» y en este caso aplicarlas a los personajes y modularlas en determinados momentos según la intención narrativa.
Así, en las películas hay una música que acompaña a personajes buenos y otra que acompaña a los malos e incluso todas ellas tienen sus variaciones determinadas por el contexto de la secuencia o lugar en que se encuentren en función o de su estado de ánimo. Un claro ejemplo de ambientación musical como vehículo para transportar las emociones de los personajes a la mente de los espectadores.
El primer tema que compuso fue el el tema más icónico de la zaga, el de Luke. En él, se utiliza el modo mayor, uno de los más luminosos que existen y cuyas notas en tono mayor se usan para describir lo positivo (en este caso, el bien). Escúchalo aquí:
Resulta curioso como a medida que avanza el arco de transformación del personaje, este modo va haciéndose más oscuro y las notas también. Pero el tema más importante se relaciona con uno de los personajes más importantes, Darth Vader. Este tiene gran número de variantes respondiendo al gran arco de transformación del personaje.
También Leia tenía su propio tema, el cual aparece en diferentes ocasiones a lo largo de la saga. Escúchalo aquí:
Pero lo más interesante de todo es cuando escuchamos los dos temas de Luke y Leia entrelazados. El resultado es un tema nuevo pero donde se encuentran presentes los individuales para dar a entender que sus historias en la película también se entrelazaban:
O el caso de otra canción resultado de las indivisuales de Leia y la de Han Solo cuyo denominador común es el uso de una nota muy concreta, la sexta mayor. Cada vez que escuchas esta nota los recuerdas a ellos:
Y, ¿Cómo no? Yoda también tenía que tener su tema propio, pero en este caso la canción cambia de modo, o sea, se hace más feliz o más triste dependiendo de la situación en la que se encuentren y, sobre todo, del tema del que esté hablando:
Como puedes ver, la música es una parte fundamental de la ambientación de las películas. Pero, más allá de la ficción, todos los seres humanos vivimos nuestra particular película de la vida en la que las melodías nos acompañan y nos emocionan en prácticamente cualquier contexto.
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